VENCIENDO LA FATIGA

CÓMO ENFRENTAR MENTALMENTE LA FATIGA
Rodrigo A. Cauas E. Máster en Psicología del Deporte

¿Cuántas veces nos hemos preguntado en qué debemos pensar cuando estamos corriendo, andando en bicicleta, nadando, ejecutando un golpe o simplemente caminando? o ¿cuántas veces nos ha pasado que hemos finalizado una competencia sin saber lo que pensamos durante ella o sin damos cuenta que nuestros propios pensamientos interfirieron en el rendimiento?
Investigaciones en el ámbito de la psicología del deporte han concluido que el autodiálogo (diálogo consigo mismo) puede influir fuertemente en el resultado que queremos obtener en cualquier tipo de competencia.


LA ATENCIÓN SELECTIVA

Durante gran parte de nuestra participación deportiva estamos focalizándonos en distintos estímulos, por ejemplo, en la pista, en otros rivales, en el público que está observando, nuestros pensamientos, etc. A este proceso le dominamos ATENCIÓN SELECTIVA, porque en definitiva estamos seleccionando a qué atender en cada momento.
Y hablaremos de CONCENTRACIÓN para referirnos al tiempo total destinado en atender selectivamente al estímulo escogido.
La relación entre la concentración y la fatiga es directa, ya que, no hay dudas de que la fatiga afecta la concentración. Cuando el deportista se fatiga hay procesos fisiológicos que atentan contra este proceso. Por lo tanto manejando eficientemente la atención y la concentración podremos controlar los síntomas de la fatiga de mejor manera.


ESTRATEGIA DISOCIATIVA Y ASOCIATIVA DE LA ATENCIÓN

Estudios realizados hace algunos años para averiguar los pensamientos utilizados por los maratonistas durante su esfuerzo, hallaron que algunos atletas prestaban atención a su propio cuerpo, sentimientos, sensaciones, aparición de dolores, respiración, sensaciones musculares, cuestiones tácticas, etc. A este tipo de maniobra la denominaremos ESTRATEGIA ASOCIATIVA de la atención.
Por el contrario hubo otros atletas que mientras corrían, pensaban en actividades cotidianas, repasando sus vidas, en general, centrados en cosas no relacionadas con el correr. En este caso utilizaban una estrategia conocida como DISOCIACIÓN de la atención, ya que, disgregaban las molestias como la fatiga o el cansancio mental.


LA ESTRATEGIA ADECUADA

Se observó durante numerosas maratones que aquellos deportistas que obtenían los mejores resultados utilizan mayoritariamente una estrategia asociativa.
Por lo tanto se relacionó esta estrategia con resultados más positivos, debido a que, favorece la focalización en lo que se está llevando acabo (en el presente) y permitiendo desarrollar en el deportista, el hábito de contactarse en todo momento con su cuerpo, evitando y disminuyendo que las situaciones que aparecen repentinamente –como la fatiga – generen ansiedad y por ende afecte el rendimiento.
Por lo tanto si se realiza ejercicio físico con un objetivo competitivo, buscando un ritmo determinado que suponga un cierto nivel de esfuerzo, es preferible centrase en la tarea, usando estrategias ASOCIATIVAS.